Conoce esta Guía de alimentación para el diabético
Cuidar la alimentación es la mejor forma de mantenerse saludable, de hecho, durante la enfermedad, una buena nutrición ayuda a superar los problemas de salud, al permitir el ingreso de sustancias nutritivas al organismo.
La alimentación durante la diabetes no es compleja, pero se necesita de una mayor disciplina en la dieta para lograr el éxito. Cuidar lo que se come no es demasiado complicado, sólo se requiere de un programa más específico.
Pirámide nutrimental
La pirámide nutrimental es una forma sencilla de guiarse para asegurar una buena alimentación, la base la constituyen todos los almidones, básicamente granos y cereales integrales como arroz, pastas, panes, papa y leguminosas, entre otros; éstos deben consumirse con moderación y sin azúcares agregados.
En el segundo nivel se encuentran a la par y en igual orden de importancia, tanto las frutas como las verduras. Por parte de las verduras no existe restricción debido a su alto contenido en fibra, que regula el índice glucémico. Pero en contra parte, las frutas deben de incluirse con cautela, ya que algunas contienen mucha azúcar, poniendo especial atención en comer las ricas en fibra.
En la parte alta de la pirámide se encuentran los aportadores de proteína, los lácteos y productos de origen animal; estos deben de incluirse a partir de alimentos bajos en grasa y en porciones suficientes. Al final se encuentran las grasas y azúcares, los cuales deben de omitirse o incluirse en cantidades mínimas para mantener la salud.
¿Cómo alimentarse?
Un buen ejemplo de dieta para una alguien con diabetes puede variar de acuerdo a sus necesidades y avance de la enfermedad, pero en general, para una persona activa, de género masculino, peso aproximado de 80kg, que inicia con un programa de ejercicio (se recomienda iniciar con actividades de tipo aeróbico), lo ideal sería:
Ejercicio y diabetes
El ejercicio es parte del tratamiento, ya que ayuda a regular los niveles de glucosa en sangre. Si lo haces de forma regular, aumenta la sensibilidad del cuerpo a la insulina, por lo que después de un tiempo reduce los niveles de azúcar en sangre, aunque es importante hacerse con moderación e ir incrementando de forma gradual, de otra forma puede ocasionar niveles demasiado bajos (hipoglucemia).
Se recomiendan actividades de tipo aeróbico como caminar, correr, nadar y pasear en bicicleta, entre otras. Para actividades de alto impacto se requiere de un control médico específico, a fin de evaluar los niveles de glucosa ideales para entrenar.
Cuidados durante el ejercicio
En general la hipoglucemia ocurre de manera gradual, por lo tanto, se debe de prestar atención a estos síntomas mientras se hace ejercicio:
Cambios en los latidos del corazón
Sentirse tembloroso o ansioso o
repentinamente
Dolor de cabeza
Sudar más de lo normal
Cansancio excesivo o debilidad
Ante cualquiera de estos síntomas se debe parar la actividad deportiva y seguir las recomendaciones para tratar la hipoglucemia. Debiéndose llevar en todo momento un carbohidrato de acción rápida para usar en caso de emergencia, a fin de aliviar rápidamente los síntomas.
