¿Duermes mal en las noches, te quedas dormido durante el día o sientes sueño excesivo? Entonces debes de saber ciertas cosas.
Los trastornos del sueño involucran cualquier tipo de dificultad relacionada con el hecho de dormir, y van desde la dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido, hasta quedarte dormido en momentos inapropiados, incluyendo otras conductas anormales relacionadas con el mal dormir, y que pueden ser síntoma de una enfermedad aún no detectada.
Trastornos más comunes
Somnolencia. Es la tendencia o propensión elevada a quedarse dormido, y que puede ir acompañada de una incapacidad o disminución de la atención y del estado de alerta, causados por un sueño insuficiente. Esto se debe a que voluntaria o involuntariamente, la persona se ha privado del sueño, o que ha tenido un sueño fragmentado por factores extrínsecos como ruido, estrés, ingesta de sustancias estimulantes como cafeína, alcohol o fármacos; o por factores intrínsecos como narcolepsia (quedarse dormido súbitamente donde sea), apnea obstructiva del sueño, cambios de turno laboral, jet lag y vejez (a mayor edad se duerme menos, sobre todo después de los 60 años), entre otros.
Hipersomnia. Es el exceso de sueño que se presenta por dormir mal en la noche, o por quedarse dormido en circunstancias anormales, como cuando vas manejando, estás de pie, o esperas el cambio de la luz en el semáforo, en un examen, en el trabajo, etc., dada la facilidad de conciliar el sueño. Este transtorno es grave, pues disminuye drásticamente el desempeño cognitivo, o sea, la capacidad de mantenerte alerta, además de que hay retardo en la capacidad de respuesta y en la atención de forma sostenida, y que pueden provocar accidentes laborales, de tráfico o hasta sociales. Además de que pueden ser síntoma de otra enfermedad como depresión, trastorno de ansiedad, abuso del alcohol o de sustancias, y algunos trastornos psiquiátricos.
Identificando un trastorno
El tiempo transcurrido normal desde que apagas la luz hasta quedarte dormido es de 10 a 20 minutos (latencia del sueño). Sin embargo, cuando dicho tiempo es menor a 5 ó 6 minutos, la latencia se considera anormal o patológica e indica la presencia de un trastorno del sueño. Asimismo, desde que despertamos hasta la noche, es normal que nos levantemos bien, con energía, pero conforme va avanzando el día, se va acumulando la cantidad de sueño, hasta que a eso de las 11 de la noche, nos
exige dormir.
¿Una siestecita?
Es normal que entre las 3 ó 4 de la tarde la mayoría de las personas sientan sueño, casi siempre después de comer. Esto se debe a que el cerebro pide un poquito de sueño para continuar su jornada de manera óptima, por lo que una siesta de 15 a 20 minutos después de la comida es útil para descansar la mente y revigorizar al cuerpo, lo cual se ha comprobado en países que permiten a sus trabajadores este tiempo de descanso antes de volver al trabajo, dado que con ello han visto incrementos en la productividad.
Tratamiento
A fin de eliminar la somnolencia diurna excesiva es común que la gente recurra al consumo de estimulantes del sistema nervioso central, como cafeína, anfetaminas (que provocan adicción, irritabilidad y acelere del sistema nervioso), así como a fármacos y bebidas energetizantes, con efectos secundarios negativos para la salud. Sin embargo, al tratarse de un trastorno el Sistema Nervioso Central es importante acudir al médico
para recibir ayuda profesonal,
pudiendo preguntarle por el uso de Modafinilo de 100 a 400 mg (diarios
según severidad y causa de somnolencia), un nuevo agente, inocuo, para ayudar a tratar la somnolencia.
