Cuando te ves en el espejo, ¿qué es lo que ves?

Cuando te ves en el espejo, ¿qué es lo que ves?

Existen al menos de 8 a 12 millones de casos de personas con desórdenes alimenticios en los Estados Unidos.

Cada vez va más en aumento el número de hombres que se realizan cirugías plásticas para mejorar su apariencia, desde implantes de pectorales y de pantorilla, hasta la reconstrucción de nariz y liposucción. Si a simple vista de tu cuerpo decides tomar soluciones drásticas para cambiar la forma en que te ves, entonces podrías estar sufriendo de un síndrome de imagen corporal llamado Desorden Corporal (Desorden de Distrofia Muscular), o BDD (Body Dysmorphic Disorder, por sus siglas en inglés).

El hombre en el espejo

Los individuos con este desorden tienen una perspectiva distorsionada de ellos que causan depresión, desórdenes alimenticios y daños a su persona. BDD también puede presentarse solo. Y aunque es más común en mujeres, también puede ocurrir en hombres que pueden estar profundamente apenados de su condición. Este desorden afecta de 1 a 50 personas, principalmente adolescentes y adultos jóvenes. La mayoría de los que la sufren pueden visitar a los dermatólogos o a los cirujanos plásticos para ayudarlos a corregir problemas que solamente ellos ven, y evitan asistir al psiquiatra o a los psicólogos.

Las Causas

Todo mundo tiene días malos cuando no les gusta como se ven. Eso es totalmente normal. El problema se presenta cuando una persona tiene pensamientos negativos sobre su persona diariamente, durante varias semanas, aún durante meses. BDD y los desórdenes alimenticios pueden ser provocados por las mismas causas: estrés, depresión, ansiedad en la actuación deportiva, abuso infantil, intimidación, o desequilibrios estructurales o bioquímicos (por ejemplo, bajos niveles de serotonina).

Los síntomas

• Una visión distorsionada de uno mismo, que es dramáticamente diferente a lo que perciben los otros.

• Una firme creencia de que son poco atractivos y por lo tanto, que no valen nada.

• Extrema vergüenza y odio a sí mismo.

• Excesiva torpeza sobre su imagen corporal.

• Un deseo extremo de perfección, que especialmente los pone en riesgo, ya que encontrarán un mayor número de defectos en su apariencia física.

¿Qué hacer?

Busca ayuda siquiátrica tan pronto como sea posible. Este tipo de obsesión fácilmente te lleva a la destrucción, abuso de esteroides, tendencias suicidas y de mutilación. Además, con tantos desórdenes psicológicos, medicación y terapia han probado ser muy efectivos. Los métodos más populares usados son los inhibidores selectivos de serotonina, que ayudan a eliminar sentimientos obsesivos o de disgusto, así que la raíz del problema puede ser eliminada. Sin embargo, el mismo tratamiento no funciona para todos, y lleva mucho trabajo y perseverancia para lograr que el que sufre de este problema pueda regresar a su vida normal.

Anorexia Nerviosa

Los hombres que sufren de anorexia nerviosa muestran cambios drásticos en su comportamiento, características emocionales/mentales y físicas. Generalmente estarán a dieta o harán ejercicio excesivamente, y tendrán comportamientos rituales en lo que respecta a la comida: como comer en pequeñas cantidades o no comer nada en frente de otras personas. Los anoréxicos se odian y tienen una visión distorsionada de su apariencia, generalmente se enfocarán en sus caderas y su estómago. También estarán obsesivamente preocupados con el ejercicio, levantamiento de pesas y en tonificar su cuerpo (constantemente se estarán pesando).

Cuando te ves en el espejo, ¿qué es lo que ves?

El precio emocional y mental que tienen que pagar los anoréxicos tiene que ver con el miedo, miedo a ganar peso, miedo al aislamiento social y un gran deseo de control y perfeccionismo, patrones de pensamiento muy rígidos, una disminución en el deseo por el sexo y una confusión sobre su identidad de género u orientación sexual, baja auto-estima, insomnio, depresión, irritabilidad o la pérdida de su personalidad propia (sus amigos pueden no reconocerlos después de un período de tiempo).

El daño físico que un anoréxico ocasiona a su cuerpo es severo e incluye pérdidas rápidas y severas de peso, fatiga y letargo, debilidad muscular, una disminución en el equilibrio y coordinación,  baja temperatura corporal, y disminución de la presión en la sangre y ritmo cardíaco.

Distrofia Muscular

También conocida como “anorexia a la inversa”, los hombres con distrofia muscular creen que son muy delgados e insignificantes, sin importar qué tan fuertes sean. Este síndrome tiene sus raíces en BDD y generalmente son tratados de la misma forma. No es lo mismo que un desorden alimenticio. En lugar de eso están extremadamente insatisfechos con alguna parte de su cuerpo, o con su cuerpo entero. Los hombres con dismorfia muscular están más preocupados por ser más musculosos sin el menor rastro de grasa. Controlan la pérdida de peso. Pero cuando lo ganan es para mejorar su habilidad atlética, no se trata de un desorden alimenticio o una imagen corporal distorsionada. Sin embargo, los gimnastas, corredores, físico culturistas, nadadores, luchadores, bailarines y jinetes son particularmente vulnerables a ésta y otras enfermedades.

Bulimia Nerviosa

Los bulímicos sufren de una obsesión con la comida que los fuerza a planear y buscar comer a escondidas (un paciente con este problema esconderá la comida), después se purgará, laxará y abusará de pastillas diuréticas y para bajar de peso. Harán ejercicio compulsivamente y estará fueran de control en sus comidas. Generalmente los bulímicos niegan tener los síntomas y la enfermedad.

Como los anoréxicos, los bulímicos también sufren de miedo de ganar peso. La mayoría son muy perfeccionistas en su apariencia y actuación. Si están bajo depresión y aislamiento social, agravará sus problemas de autoestima.

Los bulímicos también experimentan fluctuaciones drásticas de peso, pierden el esmalte de sus dientes por provocarse el vómito, el mal aliento y problemas en la piel, se hinchan las glándulas salivales, se rompen los vasos de los ojos, edemas (retención de agua), constipación, fatiga constante y letargo.

Tratamiento

Los riesgos de salud son muy serios para cualquiera que sufre de distrofia muscular y de desórdenes alimenticios: deshidratación, serios daños internos en los órganos (especialmente en corazón, hígado, riñón), desgarre del esófago, úlceras intestinales, problemas estomacales, daños en los dientes y erosiones en las encías y hasta acné. Como comentan los expertos, el admitir que tienes el problema es el primer paso para resolver los conflictos que causan los desórdenes. Ya después el paciente podrá beneficiarse con todos los tratamientos médicos y psicológicos disponibles, incluyendo terapia cognitiva y terapia en grupo, así como consultas directas, hipnosis, psicoanálisis, terapia en familia, etc. En casos severos se requiere la asistencia de profesionales en hospitales o unidades especializadas, en donde el individuo recibirá asistencia personalizada.

¿Es tu caso?

Tenemos que reconocer que saltar una o dos comidas al día o pasar tiempo extra en el gimnasio son conductas que indican la presencia de problemas. Pero cuando estas situaciones se convierten en algo más que eso, o si cualquiera de los síntomas de anorexia, bulimia o distrofia muscular te suena familiar, es necesario recibir ayuda profesional. Comienza por visitar las páginas especializadas para tratar desórdenes alimenticios en la red como: www.nationaleatingdisorders.com www.nationaleatingdisorders.com

o en www.anad.org que ofrecen servicios confidenciales.

¿Es alguien que tú conoces?

Una persona con desórdenes alimenticios generalmente puede actuar de forma totalmente normal para protegerse de su enfermedad y permanecer en control. Al menos que hayas estado en esta situación, es difícil entender por lo que están pasando. En estos casos el apoyo incondicional y la amistad es la mejor forma de ayudar al enfermo a controlar la situación. Evita confrontaciones que a la larga pueden ser contraproducentes y procura convencerlo de manera amorosa la importancia de recibir una terapia de apoyo.

Cuando te ves en el espejo, ¿qué es lo que ves?

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